Hoy, 3 de diciembre, celebramos el Día Internacional de las personas con Discapacidad. Fecha que se está consolidando como punto de reflexión para canalizar una sociedad más inclusiva por todos los agentes socializadores que trabajamos en este campo.
El reconocimiento a las capacidades se aleja sustancialmente del concepto de discapacidad. Cada persona presenta unas capacidades que le hacen ser singular en aquellas actividades de las cuales son protagonistas. Es un trabajo que los especialistas de educación, medicina, servicios sociales e ingeniería técnica, trabajamos conjuntamente para favorecer su aceptación y sean uno más en nuestra comunidad en la medida de lo posible. Las capacidades de las personas ciegas, el mundo de las personas con autismo, el deporte adaptado que ejercen las personas con movilidad reducida, prueba de ello son las olimpiadas paraolímpicas, el lenguaje de signos, un sistema de comunicación que deberíamos de conocer todos. Las habilidades de las personas con limitación cognitiva, y un largo etcétera de ejemplos que hacen que estas personas tengan unas capacidades que en ocasiones difícilmente podemos tener las personas que nos denominamos como normales.
La Consejería de Educación de la Junta de Andalucía en sus centros públicos apuesta por la inclusión, la atención a la diversidad y el reconocimiento de la diferencia, lo que le hacen ser protagonistas de la vanguardia del sistema educativo español. La base de este trabajo integrador es el esfuerzo de la comunidad educativa, siendo los maestros y maestras los dinamizadores que trabajamos en las capacidades de nuestro alumnado.
Uno de los proyectos más destacados es el PTVAL (programa de transición a la vida adulta y laboral), cuyos ámbitos de experiencia e intervención se centran en la autonomía personal, su inclusión social y preparación para el mundo laboral del alumnado que ya es adulto y está próxima la finalización de su etapa educativa. Una vez finalizada la etapa educativa, se localizan recursos sociales acordes para cubrir sus necesidades, una mención especial son las asociaciones que trabajan para este sector social que cumplen una función ejemplar. Por citar algunas, en nuestra ciudad, están la asociación de Autismo, Fepamic, asociación Síndrome de Down, Aspacys, etcétera. Van más allá para que sea realidad ese protagonismo activo en el reconocimiento de las capacidades de las personas que forma estas entidades.
Las instituciones públicas amparan y proyectan la legislación actual, para que las ciudades sean cada vez más accesibles, más diversas y sobre todo más inclusivas. Nuestra sociedad, nuestra comunidad, nuestro barrio, somos el conjunto de personas que formamos el todo, donde tenemos que convivir con responsabilidad y reconociendo las diferencias de los demás. Somos capaces de reconocer las capacidades de las personas que tienen alguna limitación en las actividades pero que en otras tienen unas capacidades ilimitadas que nos sorprendería solo con verlas.
Enlace del artículo en el Diario Córdoba:
http://www.diariocordoba.com/noticias/sociedad/reconocer-capacidades_924486.html